La llegada de Juan Manuel Azconzábal fue acompañada por las ilusiones de los fanáticos “decanos” que se motivaron de cara a 2022. En lo estrictamente futbolístico, Atlético jugó tres amistosos y cambió medio equipo, el que antes salía de memoria. Ganó, perdió y empató durante su estadía en Buenos Aires, sin embargo mostró algunas cosas que animan al hincha a soñar con un cambio radical con respecto a lo que se vio el semestre pasado. En el funcionamiento tuvo momentos de buen fútbol ante Racing, Huracán y Lanús. Triangulaciones y salidas claras desde el fondo en varios pasajes de los partidos, con intérpretes diferentes en cada partido, aunque no siempre con resultado positivo. Tenencia de la pelota y presión constante en el campo rival. Los refuerzos llegaron con tiempo para que “Vasco” los pueda acoplar en el equipo antes del inicio de la competencia oficial. Además, con los refuerzos contratados, Atlético bajó considerablemente el promedio de edad.
Lo bueno: “Vasco” y su golpe de efecto